4ª Sesión con M.

Esta mañana he tenido una sesión con M. En ella hemos trabajado las prioridades. En primer lugar le pregunté si sabía lo que era y me dijo que no, de manera que le expliqué que se trataba de elegir lo que más nos importa, lo que no podemos dejar. A continuación le puse varios casos:
En el primero, le dije que se imaginase que su familia tiene dinero ahorrado y el padre quiere gastarlo en un viaje familiar, la madre lo quiere donar a una ONG y él quiere un ordenador. ¿Cómo elegirías las prioridades? Lo primero que me dijo fue donarlo pero al cabo de seguir hablando me dijo que él quería el ordenador, así que decidía eso.
El segundo ejemplo se trataba de imaginar que estuviese apuntado en un buen equipo de fútbol y tuviese que entrenar mucho, de manera que sólo le diese tiempo a ver la televisión una hora al día. ¿Cuáles serían tus prioridades para elegir los programas?Aquí lo tuvo bastante claro, ya que dijo que se dedicaría ver el canal de deporte, que es lo que más le gusta.
El tercer ejemplo fue que se imaginase que fuese profesor una día a la semana, ¿Cuáles serían sus prioridades? Su respuesta fue que sería profesor de educación física, que el colegio empezaría a las 11:00 y terminaría a la 13:00. Durante todo el día habría deporte y se dedicaría a jugar con los alumnos al fútbol.

Una vez terminado los ejemplos le pregunté si sus prioridades habrían sido elegidas con la cabeza, es decir, según lo más correcto, o con el corazón, es decir, según sus sentimientos, sus gustos. Enseguida reconoció que había elegido las prioridades con el corazón. Entonces empezamos a hablar de que a veces debemos de hacer cosas que no nos gustan demasiado pero que es lo más correcto para nosotros, como por ejemplo estudiar para un examen.

Evaluación de la sesión: Pienso que la sesión salió de manera satisfactoria, ya que el alumno entendio lo que son las prioridades y se dio cuenta de cómo él las elegía y los caminos que hay para escogerlas.